Según Wikipedia, el Coaching es un método que consiste en acompañar, instruir y entrenar a una persona o a un grupo de ellas, con el objetivo de conseguir alguna meta o de desarrollar habilidades específicas.
En el entorno personal se conoce por coaching al proceso interactivo y transparente mediante el cual el coach o entrenador y la persona o grupo implicados en dicho proceso buscan el
camino más eficaz para alcanzar los objetivos fijados usando sus
propios recursos y habilidades.
El coaching personal es el arte de facilitar el desarrollo potencial
de las personas para alcanzar objetivos coherentes y cambios en
profundidad. En este proceso, el coach ayuda a las personas a esclarecer
sus metas, ya sean personales, laborales, de relaciones afectivas,
etc., y a ponerse en camino para alcanzarlas.
"Un coach personal es tu socio en el logro de objetivos personales.
Tu entrenador en herramientas comunicacionales y de vida, que te
acompaña en la generación de cambios. Sostén incondicional de éxitos y
errores. Guía en desarrollo personal. Co-diseñador en la creación de
nuevos proyectos. Aliento en tiempos tormentosos. Es quien te despierta
cuando estás dispuesto a escuchar tu propia alarma." T. Leonard
Todos
tenemos metas personales que queremos alcanzar, y las hay muy diversas:
querer encontrar pareja, mejorar una relación amorosa, perdonar, vivir
en paz, libre de ansiedad y estrés, aumentar la economía del hogar,
conseguir un mejor trabajo, bajar de peso... y aunque pareciera que
estas metas son muy diferentes entre sí y que requieren de enfoques y
trabajos diversos para alcanzarlas, la realidad es que todas guardan
algo en común: en que la solución al problema y la consecución del
objetivo están dentro de tí. Que tú y solo tú como individuo, tienes la
llave para alcanzar el éxito en aquello que te propongas.
Lamentablemente
la mayoría de nosotros no comprende eso. Louise L. Hay, creadora del
método de coaching transpersonal que yo utilizo, nos dice que,
independientemente del problema que se quiera solventar, la experiencia
la ha llevado a conocer que todo comienza en nuestra falta de amor
propio. ¿Y por qué falta de amor propio? Pues sencillamente porque no
realizamos que somos seres únicos, con un poderío y unas capacidades
infinitas, con un gran tesoro dentro de nosotros, capaces de abrirnos a
la vida maravillosa que aspiramos a tener. No nos damos cuenta que la
llave del éxito está en nosotros, y gastamos nuestro tiempo y nuestra
vida buscando la respuesta fuera de nosotros, esperando que sea otro el
que "nos rescate", el que nos de la solución, el que haga la
"magia-potagia" milagrosa y nos cure de todo mal con solo mirarnos, y
eso, es falta de amor propio, falta de autoconocimiento y falta de
conciencia de la Verdad.
Louise
L. Hay nos dice: "somos 100% responsables de todo lo que ocurre en
nuestras vidas". Y eso, aunque algunas personas no lo vean, es
maravilloso. Porque eso quiere decir, que aunque hasta ahora la vida
que me he construído solo me haya traído problemas y malsabores, en este
momento, AQUI y AHORA, si yo realmente lo quiero de corazón, puedo
cambiar radicalmente esa realidad y construir el mundo que sueño. "El
momento del poder es siempre el presente", nos dice Hay.
En
el capítulo 1 del libro El Poder del Ahora de Eckhart Tolle el autor
comienza con un cuento que me permito copiarles a continuación, pues es
un cuento que ilustra muy bien esto que les quiero transmitir:
Un mendigo estuvo junto a una carretera durante más de treinta años. Un día un desconocido pasó por allí.
-¿Una limosna?- murmuró el mendigo alargando mecánicamente su gorra de béisbol.
-No tengo nada que darte- dijo el desconocido. A continuación preguntó:
-¿Sobre qué estás sentado?
-Nada- respondió el mendigo- Solo una vieja caja. He estado sentado en ella desde nó sé cuando.
-¿Has mirado dentro alguna vez?- preguntó el desconocido.
-No- dijo el mendigo-, ¿para qué? No hay nada dentro.
-Echa una mirada- insistió el desconocido.
El mendigo consiguió abrir la tapa. con infinita sorpresa, incredulidad y dicha vio que la caja estaba llena de oro.
El
coach es ese extraño que no tiene nada que darte y te pide que mires
dentro. No dentro de ninguna caja como dice la parábola, sino dentro de
tí mismo. El coach es esa persona que te ayuda a ver que el tesoro
está dentro de tí. Es esa persona que te dice "el poder está dentro de
tí". Es esa persona que te facilita el camino ayudándote a ver, a
través de herramientas prácticas y de tu propio trabajo interior, tus
potencialidades y cómo alcanzarlas.
Louise
Hay nos dice que "no importa cuánto vivimos, sino cómo vivimos. ¿De
qué sirve vivir muchos años si vives aletargado? ¿De qué sirve ser
jóven, si no eres capaz de aprovechar tu energía haciendo tus sueños
realidad? Temer lo peor solo atrae lo peor, jamás te libera de ello, ni
tampoco reduce tu sufrimiento cuando llega lo que temías. Pero ver en
lo peor una oportunidad de crecimiento, es la forma de salir de esa
situación".
Eso
es lo que te ayuda a reconocer el coach: a reconocer una oportunidad de
crecimiento en cualquier situación, y una solución segura y efectiva
dentro de tí.
El coaching no es entonces una psicoterapia y eso hay que aclararlo. La psicoterapia proviene del tratamiento de la enfermedad, mientras que el coaching viene de las teorías del aprendizaje y el desarrollo,
aunque por ejemplo toda psicoterapia conlleva un proceso de aprendizaje
y todo coaching tiene una parte terapéutica. Ambas actividades
facilitan la consecución de los estados deseados por los clientes,
y ambas trabajan en el presente. Sin embargo, la psicoterapia trabaja
desde la plataforma en la que el psicoterapeuta es un experto que sabe y
tiene autoridad, mientras que el coaching actúa desde una plataforma de
iguales, donde él no es la autoridad, sino el apoyo para que tú mismo
encuentres las soluciones, logres tus objetivos y desarrolles tus
potencialidades. Buscando la obtención de un objetivo, el coach y el cliente co-crean un escenario, en el cual se establecen objetivos, según los intereses del cliente, encaminándose ambos hacia la acción. La psicoterapia tradicionalmente se enfoca en lo que está mal, mientras el coaching se enfoca en lo que se puede mejorar y desarrollar.
A mi juicio, ninguna es mejor ni peor, pues podemos decir que entre la
psicoterapia y el coaching hay similitudes en
lo que se persigue, y diferencias en los medios y métodos que se una y
otra usan. Así, a algunas personas le puede funcionar mejor una
metodología y a otra, otra metodología diferente, y al final, con
trabajo y determinación, ambas conseguirían su fin último.
Y
yo voy un poco más allá: a mi juicio, cada psicoterapeura y cada coach
tiene sus particularidades, su propio "humor" que nos puede llegar a
tocar el corazón más o menos. Así que yo no puedo hablar por todos,
solo puedo hablar por mí. Y hablando por mí, te digo lo que podrás
encontrar en mí como coach: un apoyo desinteresado e incondicional que
buscará apoyarte en tu proceso de crecimiento personal integral, en la
consecución de tus objetivos y metas concretas desde la primisa de que
tú eres escencialmente perfecto y capaz de lograr todo aquello que te
propongas. Que tu eres más que tu cuerpo, tu mente y tus emociones que
te atan al pasado y no te dejan avanzar. Que en tu Yo real, tu Ser,
reside la verdadera felicidad, la verdadera paz y el poderío para
alcanzar cualquier cosa que te propongas, y yo, como coach, estoy ahí
para ayudarte en ese proceso.
Larissa De Las Casas Pereira
Facilitadora y Coach Sana tu Vida
Terapeuta Ayurvédica
Para citas en San Sebastián de la Gomera, Canarias: móvil: 628-107-188.
Para consultas a distancia desde pennínsula y otros países: email: sanaciontrascendental@gmail.com
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